Didáctico Cuerpo Humano Foamy
- Puzzle del sistema muscular humano en foamy de 8 mm – 28 piezas.
- Base con siluetas exactas de cada músculo para encajar sin errores.
- Tamaño grande 45 × 30 cm – perfecto para piso o mesa.
- Colores vivos + nombres de los músculos principales impresos.
El Cuerpo Humano Didáctico Foamy – Sistema Muscular es la forma más divertida y táctil de aprender cómo funciona nuestro cuerpo. Este puzzle gigante está troquelado en goma eva suave de 8 mm y muestra los músculos más importantes (bíceps, tríceps, pectorales, abdominales, cuádriceps, gemelos, deltoides, dorsales, etc.) cada uno en su color característico y con su nombre impreso.
En la base está dibujado el contorno exacto de cada músculo, para que el niño solo tenga que buscar la pieza correcta y encajarla. Así aprende ubicación, nombre y forma de manera natural mientras juega. Cuando termina, puede desarmarlo y volver a empezar las veces que quiera.
Este producto es especialmente adecuado para:
- Niños de 5 a 12 años (1° a 6° básico).
- Clases de ciencias naturales, educación física y biología escolar.
- Colegios, consultorios pediátricos y salas de espera.
- Familias que quieran enseñar anatomía básica en casa.
Músculos incluidos (28 piezas):
- Pectoral mayor, deltoides, bíceps, tríceps, abdominales (recto y oblicuos), dorsal ancho
- Cuádriceps, sartorio, gemelos, glúteo mayor, trapecio, etc.
- Cada uno con su nombre claramente impreso
Características destacadas:
- 100 % foamy suave y lavable – sin bordes duros.
- Piezas grandes y fáciles de manipular.
- Colores anatómicamente diferenciados.
- Se guarda en su propia base o en sobre transparente.
- Ideal también para niños con TEA o dificultades de motricidad fina.
Aprendizajes que desarrolla:
- Reconocimiento de los principales músculos del cuerpo
- Ubicación y función básica
- Vocabulario anatómico
- Motricidad fina y coordinación viso-manual
- Interés por el cuidado del cuerpo y el deporte
¡Con el Cuerpo Humano Foamy Muscular los niños descubren cómo somos por dentro mientras juegan, tocan y se maravillan con su propio “superpoder” muscular!